LONDRES (AFP) - Los extraterrestres pueden existir, pero la humanidad deberia evitar el contacto con ellos ya que las consecuencias podrían ser devastadoras, el científico británico Stephen Hawking advirtió el domingo.
"Si los extraterrestres nos visitan, el resultado sería tanto como cuando Colón desembarcó en América, que los que no salieron fueron los nativos americanos", dijo el astrofísico en una nueva serie de televisión, según la prensa británica.
Los programas representan un universo imaginado con formas de vida alienígenas en naves espaciales enorme en la búsqueda de recursos después de drenar su propio planeta seco.
"Estos alienígenas avanzados quizá se convertirían en nómadas, en busca de conquistar y colonizar planetas lo que puedan alcanzar", advirtió Hawking.
El escenario del juicio final que sugiere en la serie "el universo con Stephen Hawking" en el Canal Discovery, que comenzó a transmitirse en los Estados Unidos el domingo.
Sobre la probabilidad de vida extraterrestre existentes, dice: "Para mi cerebro matemático, los números deja la posibilidad de pensar en los extraterrestres como perfectamente racional.
"El verdadero reto es trabajar en lo que como los extraterrestres en realidad pueden verse."
Lucir como las criaturas parecidas a un calamar, o como las manadas de herbívoros que pueden colgar en una pared del acantilado y de un color amarillo brillante que los depredadores matan a sus presas con la picaduras de cola, se encuentran entre las posibles criaturas que acechan el cosmos centíficicamente hablando.
La humanidad ya ha hecho varios intentos para contactar con civilizaciones extraterrestres.
En 2008, la agencia espacial Americana NASA envio con una frecuencia especial, partes de la canción de los Beatles "Actravez del Universo" en el espacio profundo para enviar un mensaje de paz a todo extranjero que pasa por la región de Polaris - también conocida como la Estrella del Norte - en 2439.
Pero la historia de los esfuerzos de la humanidad en contacto con los extranjeros se remonta a algunos años.
Las sondas Pioneer 10 y EE.UU. 11 se pusieron en marcha en 1972 y 1973, placas de apoyo de un hombre desnudo y una mujer y símbolos que tratan de transmitir las posiciones de la Tierra y el Sol.
Voyager 1 y 2, lanzada en 1977, cada uno lleva un disco de cobre chapado en oro de fonogramas con grabaciones de sonidos e imágenes de la Tierra.
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